Me he levantado muy temprano. El retrasar una hora esta madrugada no ha afectado a mi cuerpo.
Llego a la Malvarrosa dos horas antes de la carrera y tal como había planificado me pongo a correr por el paseo marítimo durante casi una hora antes de la carrera. Desde el espigón que separa la playa con el puerto hasta donde termina el paseo en el término de Alboraia y claro, volver.
Me sigue sobrando tiempo y tras encontrarme a París aún hago un poco más de calentamiento.
Comienzo fuerte pero cómodo. Me mantengo en un ritmo constante kilómetro tras kilómetro y lo que pienso que va siendo una merma en el ritmo de carrera sólo lo es en el cansancio acumulado. Poco a poco me voy encontrando peor pero no decaigo en velocidad. Veo al fotógrafo Royo que me toma una instantánea.

Tiene muy buenas fotos de tenis de mesa. Sin pasarlo nada mal termina la carrera con un tiempo que no hubiera pensado para 10 kms, hace unos meses. Los entrenes van bien, muy bien, pero el maratón será largo, muy largo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario